Este noviembre toca entre los Yamas- acciones a evitar- Asteya, el «no robar».
Si vienes a mis clases de Yoga sabrás que cada mes retomo un tema de Karma Yoga que es el Yoga de la acción. Si no vienes a mis clases, te lo cuento igualmente aquí.
Así dicho es algo que en principio nos parece obvio. Pero si profundizamos en el hecho de «qué es robar», no se refiere solamente a cosas materiales. Que también.
Es «no tomar lo que no te corresponde».
Son todas esas actitudes egoístas donde no consideras a las demás personas y, entonces, tomas lo que no te pertenece.
Te voy a mostrar algunos ejemplos. También sucede al revés, pero como esto se trata de crecimiento personal, mejor no miramos hacia fuera sino hacia dentro.
Por ejemplo, llegar tarde a una cita es tomar el tiempo de las demás personas sin considerar que han hecho todo el esfuerzo para llegar a tiempo.
Robar es quitar la energía de las personas invadiéndolas con nuestros problemas sin preguntarles cómo se encuentran.
Robar es no escuchar lo que nos tienen que decir.
Robar es querer ser quien no eres, copiando la personalidad de otra.
Robar (te) es no dedicarte el tiempo suficiente para ti.
En yoga, cuando estás haciendo un asana, Asteya es dedicar la energía a la zona o zonas que estamos trabajando y no desprenderla por ahi. Quizá haciendo fuerza en otro lado o simplemente teniendo la cabeza en otro lugar. También es no compararte con los compañeras de clase, porque te estás quitando la atención de ti mismo/a.
Asteya es no pretender ser quien no eres. Porque te estás quitando la oportunidad de mostrarte como eres, de ser tú. Te estás quitando el respeto hacia ti mismo/a. Robar-te es no concentrarte y no prestarte atención.
También sucede que veas todas estas cosas en otras personas hacia ti y entonces el tema de nuevo es mostrarte respeto y no dejar que te roben ni tiempo, ni espacio, ni energía, etc.
Asteya es valorar lo que tienes sin anhelar lo de las demás personas. Porque le quitas el valor y la energía a lo que posees y te quedas dedicando ese tiempo y esa energía a una ilusión.
Asteya es realmente no necesitar nada sino vivir en equilibrio repartiendo la energía (en todas sus formas, de tiempo, de esfuerzo, de pensamiento, etc).
Como ves, es algo más que quitarle algo a alguien ajeno. Se trata más de ti para darte la oportunidad de ser tú y saber quién eres.
¿Te has dado cuenta de que vives constantemente sin prestar atención a la persona más importante de tu vida?
¿Te atreves a mirar hacia dentro y darte cuenta de todas las veces en las que no practicas asteya contigo? ¿Puedes observar esas situaciones hacia ti o de ti hacia las demás personas?
Quizá, y es lo más probable, en este mes no logres cambiar todas esas situaciones. De hecho, estos son temas para toda la vida. Siempre se mostrarán de formas nuevas.
La propuesta es que te vayas dando cuenta de cuáles son tus actitudes y modifiques suavemente todo aquello que no te hace feliz.
Pd. Si crees que puedo echarte una mano, aquí estoy.