Es una cuestión universal la de que el ser humano tiene necesidad de conocer, de tener respuestas, de profundizar en quién es, qué hace aquí, cuál es su camino, etc. 

A través de diversas herramientas de conocimiento personal buscamos estas respuestas. En los últimos tiempos han aflorado muchas formas diferentes de enfocar las mismas cuestiones:  la terapia psicológica, el yoga, el mindfulness, reiki, biodecodificación, constelaciones familiares, Registros Akáshicos, etc.   

El punto de inflexióN.

En algún momento de la vida nos llega una crisis. De pronto, nos damos cuenta de que hemos llevado una vida lineal y, de manera casi inconsciente, hemos seguido un camino. Quizá sin cuestionarnos si era lo que queríamos.  A lo mejor sí, pero nos hemos perdido la profundidad y la conciencia en cada paso. 

Entonces, la crisis nos hace encontramos con muchas dudas y cuestionamientos sobre lo que hacemos o estamos haciendo. La respuesta a ello es variada. Algunas personas comienzan a introducir pequeños cambios en su vida -alimentación, deporte, una nueva afición-, en la búsqueda de algo más,  de salirse de esa rueda de hámster. 

Otras muchas personas cambian por completo su rubro, y se dedican a actividades totalmente diferentes. Hace poco conocí a una publicista en Irlanda que ahora prepara preciosos centros de flores para bodas y eventos en Madrid.

Yo misma que estudié Ciencias Políticas y Sociología y que di varias vueltas por América Latina durante años ejerciendo mi carrera, de pronto un día decidí soltarlo todo. 

Porque sí me gustaba lo que hacía, pero no me sentía llena. En algún momento llegó ese punto de inflexión, esa crisis- en mi caso vino de la mano de un muerte repentina- y me encontré sintiéndome mejor en clase de Yoga que en cualquier otro lugar.

Ahí comenzó el camino de consciencia que me ha traído por ahora hasta este punto: Yoga, meditación, formación como instructora de Yoga, simultaneado con el trabajo «oficial», formación en masajes, reiki… y así hasta llegar a los Registros Akáshicos de la mano de Tatiana Saad. 

conociendo los registros akáshicos.

En las clases de formación de Reiki, Tatiana traía abierto su canal de Registros Akáshicos, de manera que podía transmitirnos información mucho más refinada y dirigida sobre lo que nos iba saliendo en la sesión.

Me empezó a llamar la atención esa facilidad para recibir información que nos estaba ayudando a ver las cosas de otra manera. Y así en un «arrebato» muy instintivo, me apunté a cursar el primer nivel.  Total, no perdía nada y ganaba en saber qué era.

Desde entonces creo que lo que instintivamente nos llama la atención, realmente nos está llamando a ello. Que si algo resuena, es porque es para una. 

En el primer momento en que abrí mis registros por primera vez, de pronto sentía los sonidos mucho más profundos. Era como si hubieran puesto un altavoz, mi percepción se había expandido. 

Hice una pregunta y me sentí como si estuviera hablando con amigos: la información bajaba rápidamente.  Era muy fácil distinguir cuándo era yo y cuándo «ellos», porque la información llega y no hay duda, no tengo que pensar, no pienso, solo hablo. 

Es la primera vez que hablar sin pensar es beneficioso. 

Después, practicamos abriendo todos los Registros de una misma persona. Y descubrimos que se abren muchas puertas y diferentes enfoques. Que cuando abres esa puerta, se abren también ventanas y entra la luz de diferente manera. Y que puedes preguntar siempre lo mismo que te llegarán siempre respuestas diferentes pero muy certeras. 

La lectura de Registros Akáshicos como herramienta de desarrollo personal, es algo que transforma. Da respuestas muy claras y muy lógicas. Es como estar hablando con amigos y amigas que no te juzgan. Solo abren las posibilidades y opciones, te dan luz sobre un tema con la energía disponible en ese momento. 

No es un oráculo, donde preguntas tu futuro.

No, porque el futuro lo construyes tú, sólo que cuanta más información tengas de cómo estás y a qué es importante prestar atención, tu acción será más consciente y más dirigida.

Y esto pasa por conocerse más. Por saber qué es lo que quieres en la vida, seguir tu instinto y tu corazón.

Ellos saben de ti mucho más que tu mente sola. 

Conoce un poco más sobre los Registros, aquí Si esto te ha resonado, envíame un mensaje y cuéntame.

Suscríbete para recibir una meditación guiada "Baño de bosque" exclusiva para los suscriptores de Titileku.

Perfecto, ya estás sucrit@.